Las lluvias de agosto han favorecido el adelanto de la campaña, En el pirineo catalan como Pallars Sobirà, Pallars Jussà y Val d’Aran han recogido boletus edulis, rebozuelos, senderuelas, níscalos
Los buscadores de setas aficionados han comenzado las primeras cosechas de setas en los bosques de las comarcas de Lleida, sobre todo en las cotas medias y altas del Pirineo. En agosto, las lluvias en el Pirineo de Lleida han estado por encima de la media y, junto con las temperaturas nocturnas relativamente bajas, han facilitado que la campaña se haya adelantado más de 15 días y ya se hayan podido recoger níscalos, boletus edulis, rebozuelos, senderuelas, etc. en zonas de la Alta Ribagorça, el Alt Urgell, el Pallars Sobirà, el Pallars Jussà y la Val d’Aran. Los expertos auguran que la campaña de setas de este año será superior a la media de los últimos 18 años.
Un año más los restauradores y los hoteleros de las comarcas de montaña leridanas esperan la llegada de los clientes que buscan comer platos de setas e ir a coger níscalos, rebozuelos, palomitas, negrillas, rebozuelos anaranjados, lenguas de gato rojizas, manecillas, oronjas o boletus edulis, entre otros. Además, muchos buscadores de setas aprovecharán el desplazamiento para alargar su estancia para hacer turismo.
Es normal que la temporada de setas se inicie a finales de agosto o principios de septiembre, pero este año los frutos han aparecido antes de tiempo gracias a que en primavera y en verano las lluvias han estado por encima de la media en el Pirineo de Lleida y las temperaturas nocturnas han sido relativamente bajas. Por ejemplo, desde principios de junio en la Bonaigua han caído 414 mm (la media es de 260 mm); en El Pont de Suert, 386 mm (240 mm de media), y en el Port del Comte, 201 mm (la media es de 220 mm).
El Centro Tecnológico Forestal de Cataluña destaca que las copiosas lluvias caídas han propiciado que se mezclen setas de distintas estaciones, como las senderuelas, que nacen en las praderas en mayo y junio, y los boletus edulis y los níscalos, que no suelen salir hasta bien entrado septiembre y octubre. En cuanto a las predicciones, la campaña de recogida de setas de 2013 podría ser la mejor de los últimos quince años y se podrían llegar a obtener hasta 84.000 toneladas de frutos, el doble que el pasado año. Para que así sea, es necesario que se mantenga el frío por la noche, que haya una buena temperatura durante el día y que el viento sople muy poco.
Jornadas y ferias
Además de la búsqueda de setas, los visitantes pueden participar en la 19ª edición de las Jornadas Gastronómicas de la Seta en la Alta Ribagorça (del 11 de octubre al 3 de noviembre, con la participación de 12 restaurantes), las IX Jornadas Gastronómicas del Solsonès, la V Muestra Gastronómica «Cocina de la Trufa» y las XII Jornadas Micológicas del Pallars Jussà.
En cuanto a las ferias relacionadas con el mundo de la seta o que incluyen este producto, encontramos la Feria del Injerto de Peracamps-Llobera (5 y 6 de octubre), la Feria de Otoño de Sant Llorenç de Morunys (6 de octubre), la Feria del Níscalo en Coll de Nargó (12 de octubre), la Feria de la Seta y el Buscador de Setas de Solsona (del 18 al 20 de octubre), la Feria de Otoño de Tírvia (26 y 27 de octubre ), la Feria de la Seta de Isona i Conca Dellà (27 de octubre), la Feria de Todos los Santos de Oliana (1 de noviembre) y la Fiesta del Boletus Edulis de Vilaller (2 de noviembre).
Fuente:Boletin Ara Lleida / Llleidatur
Propiedad Imágenes: Infopirineo
http://ow.ly/oGrtC